La despensa se ha quedado vacía.
Mi cuerpo comenzará a secar
poco a poco sus ramas, y el verde
de las hojas cederá el paso al ocre.
Seguiré deteniéndome en umbrales
pero mis pasos no titubearán más,
el tiempo se desinfla como un globo
al que le ha entrado aire.
Y se aleja haciendo piruetas
hasta caer en picado contra el asfalto.

3 comentarios:

  1. La esperanza, dicen, es lo último que se pierde... y el verde es su color... Así que, déjese de ocres y juegue con el globo, que aún le queda mucho aire.

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    1. El ocre es igualmente bello, la luz del ocaso, los rostros gastados, las manos con surcos, los pies caminados...

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