Y esa flor...

Y esa flor murió
apenas había abierto sus pétalos.
Nadie le explicó al horticultor
que no precisa de sólidos:
es líquida,
es viscosa 
la textura
del amor.

Fragmentos


La viajera desplaza 

recortados fragmentos
en una maleta.
Al llegar debe abrir las lengüetas
de los recortables para colgarlas
en los huecos que los años
han ido amarilleando.

Es gris la mordaza
y verde el miedo.

Pero ahora ya sabe
que el corazón no se encuentra
entre la espalda y el esternón
ni los ojos bajo la frente.

Espantapájaros

Desnudar la palabra 
sus secreciones, 
despojarle su sombrero ajado, 
la chaqueta deshilachada 
y dejar sólo los palos. 

Diplomacia

Echan la cabeza hacia atrás,
estrépito de carcajadas.
Algunos exhiben en sus molares 
auténticos muestrarios de joyería,
pero sus ojos desdicen 
tanta sonrisa: 
fijos y fríos como besugos 
recién salidos del mar.

Consuelo

En cierto modo 
hemos vivido 
todos los sueños 
que en modo cierto 
no existieron. 
La conmutatividad no sirve con las palabras.