No avisaré de mi llegada,
quizá presientas por el aroma
de ciertas calles
que anduve muy cerca.
Tal vez en aquella plaza
cuando levantes la vista de tu café
y observes una bandada de pájaros
picoteando algo en el aire,
o en el reflejo naranja de un cristal
que refractaba la luz
sobre tu vaso de agua,
o en el traspiés de una mujer
que miraba hacia todos los sitios
y a ninguno sin seguir las indicaciones del equilibrista.
En una risa a destiempo.
O en una lágrima.
https://youtu.be/Y0DPt-rNonQ
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