Mis pies crecieron más que los tuyos,
tanto que tuve que estirar, con la tiza azul,
los cuadros de la rayuela.
Ícaro creció y dejó de fabricar
alas ignífugas con las que burlar al sol.
alas ignífugas con las que burlar al sol.
Los nueves ya no garantizan
la visita de las musas,
ahora buscan cielos de nubes más altas.
la visita de las musas,
ahora buscan cielos de nubes más altas.
Pruebe usted a espantar las dudas “a escobazos”. Me gusta mucho el poema.
ResponderEliminarJajajajajjaja No crea, ya he probado con casi todo...
ResponderEliminarSiempre empleo la palabra mágica..¡el amor!
ResponderEliminarEs la mejor certeza contra las dudas..🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹
Sí, quizá es la única...
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