Los poemas envejecen mal,
con suerte, algún verso,

podrá ser rescatado. 
El cuerpo aguanta como puede
la fiebre y 
el ocaso de los huesos, 
pero salta como un resorte
para dar respuesta al abrazo 
de su hija 
y recoge la flor que le entrega
junto a un corazón de gomaespuma.

Corre a saltitos a buscar un jarrón,
después llena el vacío de besos. 
Así no podrá oxidarse el amor.
Ni dejar sucia el agua.

3 comentarios:

  1. Precioso poema..con todo el sentimiento escrito para compartirlo
    Eso que solo puede hacer una gran gran poeta.Gracias.🌹🌹🌹🌹🌹🌹

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  3. Eres una exagerada y una buena amiga que siempre está.
    Te abrazo y te abrazo.
    Y todas las gracias a ti, amiga mía. ❤️

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